mercoledì 30 giugno 2010

"Aunque me encuentre agusto, necesito tu tranquilidad."

Hay veces en las que las palabras se quedan cortas y son los hechos los que marcan las pautas de mi vida. Hay veces en las que me siento pequeña, en las que el mundo se me hace complicado y finito. No entiendo sentimientos que se apoderan suavemente de mi yo, me sacuden desde dentro de repente, inesperadamente locos y yo... Y yo trato de calmar mi sed pero...
La vida es demasiado complicada para aquellos que intentan averiguar los porqués de los misterios de la existencia humana. Humanidad, aparece el vicio en cada esquina, en cada rincón, en cada recoveco del cuerpo que tienes enfrente. Pero..., hay situaciones en las que debes elegir.
¿Sabes? Para mi la vida no es complicada porque es finita. Es finita.
Instantes en los que cada gesto importa, y sin embargo otros en los que cada uno, o la falta de ellos, me atormenta. Sentirme absurda después de una ilusión repentina y extravagante, inexplicable y pasional, adolescente y que tan solo existe en un presente que acabará en el minuto dos. Contar, dejar de importarme y obligarme a mirar para otro lado. No soy así, se que puedo ir mas allá de los límites de mi mente, se que puedo llevar al extremo el éxtasis de mis sueños, apoderarme de mis actos y dar pie a...
Días largos, noches eternas. Euforia, acercamientos, en un abrir y cerrar de ojos.

sabato 26 giugno 2010

XCIV

Tu capricho y tu edad, según se mire,
provocan tus defectos o tu encanto;
y te aman por tu encanto o tus defectos,
pues tus defectos en encanto mudas.
Lo mismo que a la joya mas humilde
valor se da en los dedos de una reina,
se truecan tus errores en verdades
y por cosa legítima se tienen.
¡Cómo engaña el lobo a los corderos,
si en cordero pudiera transformarse!
Y, ¡a cuánto admirador extraviarías,
si usaras plenamente tu prestigio!
Mas no lo hagas, pues te quiero tanto
que si es mío tu amor, mía es tu fama.
William Shakespeare

martedì 22 giugno 2010

Pasar la vida entre andenes.

Tengo mil recovecos de los cuales solo ciento cuatro son conocidos. Soy un caos. Un tremendo caos, ni yo misma me entiendo en cuestiones de razón. Ilógica emocional, intento ser racional ante nuevas tentaciones.
Tentaciones. Me tienta el destino con sonrisas entre canción y canción, entre copa y copa. Con miradas de desconocidos a los ojos, fijamente. Algunas duran tan solo un segundo, otras quizás segundos de más. Y no pestañeo, y llevo al límite ese momento porque se que jamás se volverá a repetir. Tentaciones leves, lo desconocido capta mi atención de una manera sobrenaturalmente intensa.
Días paseando por las calles de Londres, respirando aire diferente, algo nuevo. Y sin quererlo lo veo todo claro, y me entusiasman nuevos proyectos que voy maquinando en esta cabeza loca... Y es genial.
No se exactamente por qué o el qué me ha hecho ver mi vida, la vida, desde otra perspectiva. Algo más idealista, algo más segura. Cuento mis errores y los analizo estando segura de que no los volveré a cometer, aún así se que el destino es caprichoso y siempre tiene para mi otros planes fuera de lo normal, siempre me sorprende poniéndome a prueba, rozando el límite de mi paciencia, queriendo saber hasta donde soy capaz de llegar por lo que quiero.
Escucho una canción, y la letra me absorve. Me pierdo entre miradas buscando una sola, una a la que mire y todo sea diferente. Una que me calme y me lleve por el camino de la locura. Escucho una canción mientras miro las fachadas londinenses y me siento tan segura, tan fuerte, tan grande...

giovedì 10 giugno 2010

¡Vamos mi niño a perder la cabeza!

- ¿Un mal día...?
Silencio. El silencio.
- Yo, cuando tengo un mal día, doy un paseo a media noche. Camino lento, respiro hondo. Miro las estrellas que se mezclan con las luces de la ciudad en un paisaje de locuras encendidas que me transmiten una sensación de paz profunda. A veces llego al puente, y siento la humedad cerca. Eso me gusta. Cuando vuelvo a casa lleno la bañera con agua tibia, le echo crema hidratante, aceite y jabón para hacer espuma. Elijo mis canciones favoritas y me sumerjo en el agua después de desnudarme lentamente, escuchando las más preciosas melodías. Cierro los ojos y me quedo así, simplemente así. Sin pensar en nada. A veces me da por sonreír, otras derramo alguna lágrima. Y eso me gusta. Pero..., ¿sabes qué es lo que mejor me sienta cuando tengo un mal día?
Silencio.
- Hablar contigo. Porque me tranquilizas, porque me haces reír. Porque me hablas de cosas extravagantes, tartamudeas a veces y otras te quedas en blanco. Porque eres seguro, porque te quieres. Porque eres sencillo y a la vez complicado, porque eres como un paseo y un baño relajante, porque eres todo lo que necesito al final de un día. Ya sea bueno o malo. Y eso no es que me guste, eso me encanta.
M. Cavalli

domenica 6 giugno 2010

La dulce niña Carolina...

Llorar es tan sano y a la vez tan injusto. Al menos para mi.
Recuerdos amontonados en mi mente y estrofas nuevas que llegan a mi vida sin yo quererlo. Dolor del pasado que hace mella en el presente, pero va liviano pue yo curé mis heridas con veneno de serpiente. Es simple, nunca he fracasado. No me siento así aunque mi alma esté dañada, nunca pisé en falso pues siempre creí en mi. Y quien me dolió que se lleve las cenizas a otra parte..., que yo no las quiero. Quien me dolió que me seque las lágrimas con su ausencia y que no me mire a los ojos cuando nos encontremos.
Las estrellas brillan en el cielo y hoy no me siento una de ellas, solo quiero dormir. Soñar, sin casualidades. La vida sigue su transcurso y yo sigo sentada en el suelo admirando cada segundo y presenciando la rutina de los demás. Yo no soy así.
No quiero a nadie que no sea pasional, no quiero a nadie sin metas, no quiero a nadie que no pueda admirar.
Puede que no sea una buena noche para comenzar a hilar una nueva vida, pero qué mas da si las letras recorren mis labios, amontonándose en mi garganta y saliendo torpemente de mis dedos. Pero qué mas da si aún tengo diecisiete años y una fuerte voz que grita en mis adentros. Pero qué mas da si me encontré con dos ojos sin quererlo y a día de hoy...
Cuando el tiempo pasa piensas en quien te quiso y quien te utilizó, quien es bueno y quien es malo, y las conclusiones cambian cada día pues nada es seguro, todo poco probable. Nada es lo que parece pero todo es lo que parece.
No quiero vivir así, vigilando mis espaldas. No quiero sentir que años de evolución no sirvieron para nada mas que alimentar la codicia y la ambición. Peco de idealista y no me callo al gritar que me mudaría de planeta para empezar de cero con otros valores, con mas humanidad.
Soy joven y las manos me tiemblan al igual que mis labios de vez en cuando. Me puedo enamorar pues el amor es mi religión y aunque no tengo la edad nunca le daré la espalda a un te quiero sincero.
El agua recorriendo nuestros cuerpos y un segundo en el que todo se paraliza con un simple beso, en eso se resume esta noche mis deseos y espero que cumplas con tu parte y todo surja..., yo no voy a ser menos.

mercoledì 2 giugno 2010

Free Fallin

La ilusión del comienzo debería de alargarse una eternidad. Una eternidad, esa sonrisa. Sonrisa eterna, mientras muerdes tu labio inferior bajando la mirada. Qué preciosa sensación, que excitación tan desmesuradamente mágica.
El amor del que tanto he hablado y ni yo misma he sabido manejar. El amor al que tanto he admirado y al que sigo admirando cada día. Por los pequeños detalles que hacen que el mundo parezca un sitio mejor, aunque no sea cierto. Aunque yo no esté en la historia, sentarme y ver la película real de un amor cualquiera, como simple espectadora, me hace sonreír.
Poco a poco voy subiendo por los escalones de la vida, algún tropiezo que otro pero nunca toco el suelo. Vuelo, corro. Lloro, muy poco. Río, bastante. Conozco otras vidas, pruebo sabores diferentes y exóticos y juego con mi imaginación imaginándome ser parte de ellas. Noches en vela sonriendo ante el sueño despierto de un baño a media noche, o un amanecer congelado en una foto inundada por dos sonrisas.
Sin complejos, sin dudas, sin miedo; soy yo.
Ya nunca voy a dejar de quererme.
He comprendido tantas cosas en estos dos últimos años, pero la más importante es que para que me quieran tengo que empezar a quererme yo misma. Para que me respeten, me tengo que respetar yo a mi misma.
El respeto es una de las bases de las relaciones. El respeto en todos los sentidos que alberga su definición. En todas las relaciones con las demás personas, desde compañeros hasta pareja, pasando por amigos y familiares. Conocidos, desconocidos. Respeto al mundo y a los que vivimos en él.
Inconsciencia e indiferencia. Ambas tachadas en mi vida desde hace algunos días.
Porque sí importa, cada gesto importa. Efecto mariposa, todo tiene consecuencias. Todo. Puedes dejar que la vida te resbale, puedes hacer como si nada ni nadie importara. Pasar las hojas del calendario, simplemente viendo la vida pasar delante tuya sin aspirar a nada más. Haciendo daño y haciéndote daño inconscientemente. Llegará el día en el que mires atrás y te preguntes qué has hecho.
La vida es un regalo. Es un precioso regalo, nadie parece darse cuenta. Nadie parece darse cuenta de que hay a quienes le arrebataron algo tan simple y bello como es el vivir. Como es el crecer, como es el reír, como es el querer. Nadie parece darse cuenta del mundo tan sumamente egoísta en el que vivimos. Quizás pocas personas saben lo importante que es el afecto, los abrazos sinceros o un bonito y simple gesto que puede alegrarle el día a cualquiera.
Pero..., ¿quién se preocupa de querer alegrarle el día a los demás?
"Be the change you want see in the world"